La práctica artística de Alexia Pedal se enfoca en el material como agente de revelación. El contacto temprano con vestigios culturales y técnicas tradicionales, como el tejido y el bordado, son la fuente de inspiración de su estética kitsch. Alexia está interesada en una aproximación holística del arte e investiga sobre la urdimbre que conecta los métodos terapéuticos del proceso creativo con elementos plásticos contemporáneos.

“Vivimos inmersos en el lenguaje digital y los límites entre la realidad física y virtual son cada vez más difusos. La experiencia del espacio ha cambiado completamente y el textil sigue siendo un constante agente de conexión que nos regresa a nuestra dimensión biológica. Debemos recuperar el valor del lenguaje textil como elemento conectivo e integrador de nuestra cultura tan diversa”, afirma.

Su interés principal es el aspecto ritual y cognitivo del proceso de lo hecho a mano. Es por eso que confecciona todas sus piezas personalmente.